MISTERIO DEL SECRETO DE FÁTIMA O INIQUIDAD EN LA «NUEVA ROMA»?

A menudo se llega a conclusiones ciertas tras deducciones inconsistentes. Por ejemplo en el articulo publicado en Radio Cristiandad; EL TERCER SECRETO DE FÁTIMA SIGUE SIENDO UN MISTERIO. La conclusión es casi cierta :

«Fátima ha sido es y será un clamor del cielo contra la falsedad de la iglesia conciliar. Un aviso para que estuviéramos atentos a los signos que acompañarían a la “gran apostasía”. El gran engaño llevado a cabo por las autoridades desde Juan XXIII en adelante es sin dudas un gran escándalo que aun no ha llegado a su cénit.»

Terceiro Segredo de Fátima

Pero, las «autoridades» papales que perpetraran y perpetran engaños escandalosos en el campo dela Fe, que incluye indirectamente la señal de un designio divino, como esla Aparicióny el Mensaje de Nuestra Señora de Fátima, no pueden estar acompañados por una legitima autoridad de Dios para esta “gran apostasía”? Cual falsedad mayor que esta?

El facto es que desde el momento que se acepta una falsa «autoridad suprema», todo el que sigue tiene es por esta razón acompañado y marcado por grave carácter escandaloso. Esta es la razón mayor! Pero non por esto todas las cosas menores lo mismo son falsas y escandalosas. En realidad solo sobre las pequeñas verdades se puede erguir grandes falsedades qui, sin las primeras no tendrían ninguna consistencia.

Desde muchos años yo testimonio y escribo su Fátima. De reciente escribí sobre la autenticidad de la tercera parte de Secreto publicado en 2000 en varias lenguas (veja aqui) y espero que Cristiandad lo publique para esclarecer muchos puntos y para responder al articulo mencionado a la luz de una fiel sensatez.

El escrito, en resumen, trata de los contenidos del Secreto, porque es ahí que se encuentran los elementos del designio divino que nos deben interesar y que ninguna falsa autoridad clerical puede censurar, obscurecer o desapropiar para un culto personal. Solo por un cierto tiempo eses engaños pueden prevalecer si seguimos la buena lógica y mismo si la vidente Lucia los ignoró. Resultado: sus contradicciones van a indicar, no solo la verdad, sino quien la quiere alterar en vista de un plan para una «religión más universal» que no pide más conversión ala Iglesiade Dios Uno y Trino.

Aquí me voy a limitar a consideraciones sobre posibles cartas fraudulentas qui podrían  demostrar la inautenticidad del Secreto publicado por el Vaticano en 2000.

Es verdad que el cardenal Bertone quiso arrumar las cuestiones del «secreto» de modo a que todo fuese en la dirección querida por Juan Pablo. Por esto evitó las verdaderas preguntas que debía hacer a Lucia, como le escribí en una carta del año 2000, antes de sus promociones, debidas en parte a sus maniobras en Fátima.

Pero, adaptar y mismo amputar una frase sospecha no significa falsearlas. Por ejemplo, la frase «que tanto ansiais conocer», era la repetición de lo que Juan Pablo escribió a la Hermana.

Una frase peligrosa para el papa de Bertone que había siempre fingido que non conocía el «Secreto» hasta el atentado de Plaza San Pedro. En el hospital, todavía, confesó a un reportero que lo conocía desde en tiempo de su elección. Bertone, conociendo tal ambigüedad procuró evitarla para defender su jefe.

En lo que respecta la caligrafía de Lucia, quién conoce sus múltiplos escritos, como sea los que están entre los documentos de Fátima coleccionados por P. Antonio María Martins, sabe que ella por veces escribía en manera diferente. Se puede deducir que esto es debido a un ejercicio y preocupación continua de tener oculto el «Secreto». Así, cuando se trató de ubicar la frase – en Portugal se conservará siempre el dogma de la fe – ella optó por ponerla de modo que no diese a entender lo que seguía al etc.

Lo mas extraño es que hoy, contra toda la lógica, se quiere negar el sentido simbólico de la visión. De esto me acusa el editor/escritor Laurent Morlier (… un faux):

certains sédévacantistes (Arai Daniele) y voient, eux, confirmation de leurs thèses : à partir de 1960, la papauté est tuée ! Comme quoi, ce texte est à géométrie variable : chacun peut le faire aller dans le sens de sa thèse…

Este autor hace una contradictoria acusación al decir que yo y otros utilizaríamos la visión simbólica para confirmar el sedevacantismo y la fecha de 1960. Así la visión seria falsa porque simbólica! Pero la confirmación que la visión no es de nosotros, y el facto que seria más clara en 1960 es de Lucia para obispos y para el Cardenal Ottaviani. De todo modo a la muerte del papa en cualquier visión, sigue una vacancia real y no simbólica. O no? Aquí se habla de algo que seria «más claro» en 1960 y tenemos este masacre del Papa con el su entero séquito. Por lo tanto nadie inventa ni un hecho, ni su data, ni su consecuencia.

Que hay de geometría variable y personal en esta lectura? La sola respuesta esta en la negación de la misma geometría mental de la verdad en buena filosofía es conformar lo que fue visto a la realidad. Morlier no lo hace negando, no alguna tesis, pero la visión misma! No se entiende entonces como este autor resuelve sus enigmas. Porque sino a poco tiempo creía que Pablo VI estaba vivo, convertido y prisionero en los calabozos del Vaticano! Una tripla tesis que de contacto con la realidad tiene solo la imaginación obcecada por el terror de la Sede vacante real. Esta pero non depende del activismo de editores voluntaristas, sino de lo que dicen, hacen y declaran «urbi et orbi» contra la verdadera Fe, los que tomaran asiento en el Vaticano.

He aquí la verdadera cuestión mayor. La menor: que publicaron el «Secreto» autentico pensando poder apropiarse del atentado al Papa católico para continuar el culto de personalidad y del hombre. En el momento se están beatificando unos a los otros sin obstáculos, porque hay un mundo indiferente de creyentes, también tradicionalistas, fieles a la tesis que el conclave tiene un poder absoluto al cual Dios obedece otorgando directamente Su poder en la Iglesia al hombre elegido, mismo cuando cardenales modernistas elijen a otro filo masón y modernista para implementar una doctrina espuria como a del Vaticano II.

Es la blasfemia de pensar que estos elegidos iban a destruir la Fe, pero el Señor, o no sabia o no se interesaba o concordaba con tal desolación! Y esto, cuando en el Derecho de iglesia esta claro que para ser elegido hay que ser de fe católica. Si no, su elección es nula, mismo se recibió el voto unánime de los cardenales.

Algunos pretenden que Nuestra Señora debía decir todo lo que pasaba ayer y pasa hoy en la Iglesia; debía hablar de las desviaciones del Vaticano II, y porque no, de la abominación de Assis; todo para que se entienda que vivemos la grande apostasía! Esto se parece mucho con la actitud de algunos que se quedan auto enyesados para esperar la venida del Señor, que debería, según ellos, venir a restablecer todo lo que los hombres ni siquiera entienden que pasó!

Lo que duele es que el Mensaje de Fátima fue dado para ayudarnos a reconocer estas grandes alucinaciones de nuestros tiempos, que después de las grandes guerras y revoluciones, sería aun peor porque alcanzaría la destrucción de la misma Cristiandad por medio de su vértice romano.

No se trata de una tesis, mas de una realidad terrible, a la vista de todos, mismo sin necesidad de visiones. Pero, si mismo con la visión dada por Nuestra Señora y Madre, y que la Providencia proporcionó para ayudaros a entender la decapitación del papado, esta es negada; si, mismo delante de las falsas doctrinas conciliares de los Juans y Pablos, no se quiere entender la vacancia actual de la autoridad católica, entonces se queda claro que el misterio non está en la tercera parte de «Secreto», mas estamos delante del misterioso, pero por nada secreto misterio de la iniquidad. Una situación que se pude concretizar, como previó el Apóstol, solo después de la apostasía geral. Ahí está: No fueron capaces ni mismo de entender lo que se les ofrecía para evitar el letal atolero de una comprobada falsa iglesia y para seguir la llamada apocalíptica:

«Sal de ella, oh pueblo mío, para que no seas cómplice de sus pecados, ni participes de sus plagas; porque sus pecados se han acumulado hasta el cielo y Dios se ha acordado de sus crímenes» (Ap 18, 4-5).